CAMBIO EN LA DIRECCIÓN GENERAL

Queridas familias:

Con esta carta me despido de vosotros como directora general de nuestro colegio tras nueve años de aprendizajes, de celebrar éxitos y de afrontar fracasos, de aciertos y errores, pero, sobre todo, de oportunidades para ofrecer mi servicio en el centro que me ha visto crecer personal y profesionalmente desde que tenía ocho años.

Aunque desde otra posición, mi vínculo con el colegio seguirá siendo el mismo y comparto con vosotros la ilusión que me produce el regreso a las aulas para reencontrarme de nuevo con la esencia de nuestra vocación en esta última etapa de mi vida profesional.

Creo que el colegio es mucho más que el espacio físico, el edificio que lo alberga. Es también, y sobre todo, un espacio emocional único e irrepetible que entre todos (alumnado, familias, profesores y personal no docente) creamos y que se va llenando cada día con lo que todos y cada uno de nosotros vamos aportando, con lo que somos.

Y creo también que la gratitud es uno de los valores más importantes del ser humano y que lo poco o lo mucho que yo haya podido hacer durante este tiempo desde la dirección del colegio ha sido siempre gracias a todas las personas que me han acompañado.

Agradezco a Fundación Educación Católica la confianza depositada en mí desde el primer momento para que nuestro proyecto educativo siguiese creciendo y cumpliendo la misión que nos ha sido encomendada. Gracias por hacerme sentir siempre respaldada y acompañada.

Al claustro de profesores y personal no docente, compañeros y compañeras de todas las etapas, que regalan lo mejor de sí mismos para intentar que vuestros hijos e hijas consigan ser su mejor versión en todos los aspectos. Gracias por su dedicación y vocación de servicio.

A vosotros, las familias que en un momento determinado optasteis por elegirnos y compartir con nosotros el maravilloso reto de educar. Gracias por confiar en este colegio y dejar en nuestras manos el bien más preciado que tenéis: vuestros hijos e hijas.

Y gracias a nuestro alumnado, el motor que nos impulsa cada día. La razón por la que, pese a todas las dificultades, merece la pena seguir adelante. Los que consiguen dar significado real a nuestro lema: “Hacemos escuela, educamos personas”.

A partir del 1 de septiembre tomará el testigo en la dirección general del colegio María Rodríguez, coordinadora de Animación Pastoral en el actual equipo directivo. Su forma de estar presente, de escuchar y de servir la convierte en ejemplo de humanidad y vocación. Estoy segura de que, de su mano, el proyecto institucional seguirá creciendo en nuestro colegio, manteniendo la apuesta por la excelencia , el ambiente familiar y el compromiso cristiano que siempre hemos querido que nos distinga.

Cada año, en la graduación de Bachillerato, le he recordado al alumnado que deja el colegio para comenzar una nueva etapa vital, la importancia que tiene el dedicarse a lo que de verdad importa, y que la vida está hecha de tiempo, y aquello a lo que dedicamos nuestro tiempo es, al final, a lo que dedicamos nuestra vida.

Muchísimas gracias a todos los que me habéis ayudado a recordar cada día a qué he querido dedicar mi tiempo y, por lo tanto, a qué he querido dedicar mi vida.

Un fuerte abrazo,

Eulalia López Lorca

Directora General